Ya no sé que sentir. Si tan solo todos mis problemas pudieran tener una simple solución. Cada día me va desgastando más y ya ni siento esas ganas de levantarme.

Oh, pero si no hay necesidad de dramatizar querido! Todo estaba dicho sin palabras.

Por ahora no quiero recibir atención, esto se trata de mi. No tengo un público al que entretener.

Y era como si todos mis gustos se hubieran expandido, de una manera mucho mejor de la que hubiera podido pretender.

Soy una chica salvaje sentada en mi trono, yendo hacia afuera, yendo por todo. Golpeando hacia afuera, golpe por golpe. Déjalos que hablen. 

Parece que todos siempre tienen algo que opinar. Y parecería que esto es un concurso de quien puede tirar al otro más abajo. Lo más irónico de todo, es que a esas personas las llamas amigos.

Hay un nuevo significado para "libertad" cuando estoy contigo.

Cada marca en mi cuerpo. Conoces cada pulgada de mí. Todas las partes que yo solía odiar, tú las glorificabas.

Podría contarte el más profundo y oscuro de mis secretos, sabiendo que lo guardarías. Y que esto no cambiaría en nada nuestros sentimientos

Ahora mismo el mundo entero podría llamarme fea. ¿Qué más da? Para ti, no lo soy. Tú no me amas porque sea hermosa, no. Yo soy hermosa porque tú me amas.

Parada mirando al espejo, donde he estado lavándome la cara, mi máscara corriendo bajo mis mejillas. Observando mi reflejo, cada pequeña imperfección. Y ¿quién habría pensado que, estaría tan contenta en mi propia piel?

Cuando lo vio no pudo evitar sonreír. Imaginaba todos los momentos que pasarían juntos si tan solo lo intentaban. Así que tomó la primera oportunidad y él la vio. Pasaban cada martes y jueves juntos, mientras jugaban como dos chicos enamorados. Nadie mas se encontraba alrededor cuando estaban cerca, y los ojos de ella solo miraban los de él. Nunca ninguno de los dos dijo una palabra sobre lo que sentían. Nunca ninguno de los dos ser arriesgo a dar el primer paso. Y ella quiso intentarlo, pero tuvo miedo y camino lejos. Y con ella, todos los recuerdos y todas las oportunidades de estar juntos se desvanecieron. Él nunca volvió a verla, y ella siguió con su vida. A veces a la noche cierra sus ojos y puede verlos jugando como si nada hubiera cambiado. Ahora, han pasado 8 años desde ese momento. Así que, ¿Todavía piensas en mi, como yo pienso en ti? ¿Todavía me recuerdas?.

Esto es todo lo que necesito.

La esperanza que me dio tu amor no me la dio más nadie, te juro, no miento.

A lo mejor de tanto repetir esa frase me la termino creyendo.

¿Ahora entendes un poco más mi trágica vida?.

Busco llenar mi interior completamente vacío e infeliz con cosas materiales, pero nunca es suficiente.

Es muy simple ver las cosas desde afuera, no comprender nada de lo que pasa y no tener ni la más mínima idea de lo que siento. Para entender cada uno de mis cortes tendrías que haber estado en cada una de mis batallas. Y cada una me hizo más fuerte, pero nunca lo suficiente. ¿Cuantas veces quise hacer las cosas bien? ¿Cuantas veces quise ser lo suficientemente perfecta para dejar de escuchar esas voces?. Dí todo para callarlas y todo me salió mal. Ya no soporto sus palabras, las de todos. Trato de hacer lo mejor posible. Si pudiera cambiar mi espíritu y todo mi interior lo haría, porque hasta ese extremo me han llevado. No es broma cuando afirmo que sos lo único que evita mi suicidio. Y si, estoy bien, siempre estoy bien. Depende de a que bien te refieras. No quiero estar aquí, no quería esta vida, ¿Por qué no simplemente no termino con esto?. Sería tan fácil, nadie lo notaría. Nadie me extrañaría, al menos la mayoría. Según mi madre soy una perdida de tiempo, una copia exacta de mi padre, una inútil,  una rebelde, y no tengo solución porque ya estoy perdida y no valgo la pena. Y estoy empezando a creerle. Según mi padre, creo que ni me conoce y no le importa siquiera. Mis amigos se toman la libertad de tirarme al piso con todas sus palabras. Y son tantas que ni siquiera puedo recordarlas. Y estoy empezando a creerlas. Quizás tienen razón. Quizás debería aguantar un poco más. Pero, ¿Hasta cuando los cortes pueden camuflar el dolor? Ya no quiero vivir así, ya no quiero vivir simplemente. Quizás algún día escriba una carta suicida. Quizás no sea tan valiente, o tan cobarde. De todos modos eso no importa, porque mañana estaré con una sonrisa otra vez y nada de esto importará hasta mi próximo error. Y si alguien lo mencionara simplemente sonreiría y diría que no es nada, que es irrelevante. Así que no lo menciones. Ya encontraré la manera de estar bien. Hasta tengo un plan para solucionarlo, así que dejame tomar el mundo en mi espalda como siempre lo hago con mi sonrisa fingida. Esta es simplemente otra de las tantas veces en las que toco fondo.

Todo lo que hago, lo hago porque te mereces todo lo que pueda darte. Porque me elegiste a mi, cuando podrías tener a cualquiera que quisieras. Porque dedicas todo tu tiempo a hacerme sonreír y hacerme sentir especial. Todo lo que hiciera jamás alcanzaría para devolverte todo el amor y todas las risas que causaste en mi. Todo lo que siempre me diste fue amor, aún cuando yo cometía mis peores errores. Me entendiste, me esperaste, me aceptaste cada error. Te dije que quería pasar el resto de mi vida con vos y no sentí ningún miedo cuando lo dije. Quiero poder hacerte sentir especial cada momento. No quiero perder lo que tenemos, porque es algo que solo algunas personas pueden sentir. Sos mi apoyo, con el único que cuento si mis planes salen mal. No quiero perderte.

Fue bastante cruel lo que dijiste pero creo que el precio que pagaste fue lo que más me hizo reír. La justicia divina existe.

No puedo aprender si no me caigo. Lamento no haber nacido siendo perfecta, pero al menos no me frustro. 

Quiero entrar corriendo en un quiosco, preguntar que año es, cuando alguien conteste decir "¡Funcionó!" y salir corriendo de nuevo.

Todos quieren lo que tengo contigo, porque estoy en la cima con una vista impactante.

¿Quién eres tu? Quiero estar contigo, hasta que el sol aparezca.